lunes, 26 de febrero de 2024

Pronombres: Facto Delafé y las Flores Azules

Vienes del este, vas hacia el oeste,
perdiste el norte justo en el sur.
Vienes del este, vas hacia el oeste,
perdiste el norte justo en el sur.
Vienes del este, deja a éste, lárgate.
Me fui, me largué y te vi, era de madrugada,
las calles, las luces, las puertas, los cruces,
metiste la mano, salimos volando,
cruzamos el centro, llegamos al norte,
tocaste mi cara, regalos, reproches.
Acabó la noche, acabó la noche,
apareció el sol, salí de tu casa,
salí de tu cama y desde entonces sé
que solos están mis labios, solos mis oídos,
sola mi voz, este es mi yo,
acato mis errores, todas mis hazañas,
este es mi lenguaje, yo soy tú.
Perdiste la partida creyendo en la victoria,
el monstruo de la tele, siempre él,
juega con ventaja, no comete errores,
ataca por la espalda, sabe que nosotros
somos la gente, el grito del presente,
nosotros el puño hundido en su frente,
somos la causa, todo por el tiempo,
el tiempo es vida, la vida es vosotros,
vosotros los nuevos, vosotros el futuro,
mi casa es tu casa, su casa la nuestra,
la vuestra y la suya, estamos aquí juntos,
nos gusta lo bueno, cuidado con ellos.
Ellos son el frío,
ellos los políticos,
ellos la espada,
ellos la espalda,
ellos son buenos,
eso cuentan ellos,
¿cómo pueden dormir tranquilos?
Ellos, vosotros, nosotros, él,
tú besas el aire que besa mi cara.
Ellos, vosotros, nosotros, él,
tú eres la luz cada mañana.
Una mano luciente y caliente,
caliente como el sol y tengo suficiente.
Una mano luciente y caliente,
caliente como el sol y tengo suficiente.
Una mano luciente y caliente,
caliente como el sol y tengo suficiente.
Una mano luciente y caliente,
caliente como el sol y tengo suficiente…

domingo, 25 de febrero de 2024

Prueba de Lengua Ev II

 





Prueba de Lengua y Literatura   1º ESO  Ev II


Resume en cinco líneas el cuento. (2p)










¿Qué elementos de la narración ves en él? Enuméralos (1p)



Opina sobre este relato (3 líneas mínimo) (1p)






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SINÓNIMOS ANTÓNIMOS DERIVADAS (1p)

Pon dos sinónimos y dos antónimos de VALIENTE

   Sinónimos

  


 Antónimos


¿Conoces alguna otra palabra que provenga de VALIENTE?




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INVENTA  1p

Inventa un final para este relato





Inventa una noticia parecida a este relato




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PODCAST/extranjerismo 2p

¿Qué es un podcast?



¿Por qué esta palabra es un extranjerismo? Se podría usar un término castellano?. ¿Qué extranjerismos usamos?



Describe tu labor en el podcast en que participaste



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La vida de  Calabacín   (2p)

¿De qué nos quiere  hablar este relato/película? 





Opina sobre ella    (mínimo cinco líneas)






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lunes, 19 de febrero de 2024

Sintel cortometraje


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"Sintel" es el tercer gran proyecto animado de la Blender Fundation, tras "Elephants Dream" (2006) y "Big Buck Bunny" (2008) y narra la historia de una chica y su dragón que es secuestrado por otro dragón, lo que hace que la chica comience una larga aventura para encontrar a su compañero. Como los demás trabajos del la fundación, "Sintel" es de libre distribución y puede descargarse gratuitamente desde su propia web oficial o visionarse en el mismo lugar en versión original o con subtítulos en varios idiomas, entre ellos en español. 

Somos anormales

 



Somos anormales      Residente

Tres ojos, cuatro orejas

Mucho pelo entre medio de las cejas
Con los cachetes, llenos de granos
Sin brazos ni piernas como los gusanos
Imperfecciones en todos los lugares
Cicatrices, jorobas, lunares
Juanetes, en los dos pies
Con ocho dedos, en vez de diez
Blanco, que se te ve la venas del cerebro
Como café, sin leche, bien negro
Mal distribuido como las vacas
Mucha barriga pero con las patas flacas
Cabeza grande, cuerpo chiquito
Celuliticos, los muslos blanditos
Mucho labio, bembón o bembona
Una nariz que parece otra persona
Aquí todos somos deformes
Y nos resistimos a usar uniforme
Lo más feo de la flor es el tallo
La belleza se alimenta de fallos
Cómo nos vemos curiosos
Ponemos a los lindos nerviosos
Que toda la gente nos señale
Lo que no es igual, sobresale
Soy Anormal
Somos anormales
Lo que me gusta de ti
Es que tu eres anormal
Nuestra sexualidad se despierta
El ADN con las piernas abiertas
Los cromosomas bailando bolero
Las hormonas con hambre
Lamiéndose los cueros
Y procreamos una cosa bien rara
Como nosotros pero con otra cara
Nuestra genética, un laberinto
Somos igual de distintos
Lo que se mezcla es más interesante
Como una mosca con orejas de elefante
Los colores se triplican, nadie pierde
Amarillo con azul hacen verde
Original, no lo pueden copiar
Lo que es impuro no se puede duplicar
La raza se arregla, cuando se daña
Somos de la tribu que con sucio se baña!
Soy Anormal
Somos anormales
Lo que me gusta de ti
Es que tu eres anormal

Autores de la canción: Rafael Arcaute / Rene Perez Joglar

La vida de Calabacín


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"Pronto hará tres meses que Ahmed se hace pipí en la cama y que todas las mañanas pregunta a Rosy si su papá va a venir a verle. Simon, que siempre está al corriente de todo, dice que el papá de Ahmed vendrá el día que se escape de la cár cel y Rosy le dirige una de sus miradas y Simon abomba el torso y pide a Rosy que le ate los cordones de las bam bas, que siempre lleva desatados. Rosy dice «conmigo no hace falta que te hagas el gallito». Ahmed, Simon y yo compartimos la misma habitación. La primera noche, Simon me dijo que me quedaría allí al menos tres años y que me convenía untarle las tostadas por la mañana y que si no lo hacía me haría la vida impo sible. Simon es así, le encanta hacerse el gallito, amenazar a los demás, pero si le levantas un poco la voz, deja de dár selas de listo. La primera mañana unté de mantequilla la tostada y se la aplasté en la nariz y él me tiró del pelo y yo también y Rosy nos separó con su mirada terrible, «aquí ni hablar de eso, o seréis castigados los dos», y Ahmed lloró porque siempre tiene la impresión de haber hecho alguna trastada y a veces Simon y yo nos aprovechamos y lo señalamos con el dedo incluso cuando no ha sido él. "





Huérfanos literarios

Oliver Twist (1838), David Copperfield (1849-50), Tom Sawyer(1876), Heidi (1880), El príncipe y el mendigo (1881), Huckleberry Finn (1884), El pequeño Lord (1885), David Balfour en Secuestrado (1886), Mogwli en El libro de la selva (1894), Dorothy, en El maravilloso Mago de Oz (1900), Kim (1901),Rebecca la de la Granja Amarilla (1903), Ana de las tejas Verdes (1908), Sara, enEl Jardín Secreto (1911), Pollyanna (1913), Tarzán de los monos (1914), Emily, la de Luna Nueva (1923), las niñas de Zapatillas de ballet (1936) y demás libros de la serie, Pippi Calzaslargas (1945) y Frodo del El Señor de los Anillos (1954), el huérfano ha venido manifestándose en la narración de historias de forma constante. Esta presencia persistente en muchas culturas explica, al menos en parte, por qué continúan los escritores de hoy invocando en sus obras la figura del huérfano; así recientemente podemos citar a Cat y Gwendolin Chant de la serie Chrestomanci de Diana Wynne Jones, Violet y sus hermanos en Una serie de catastróficas desdichasde Lemony Snicket, James en James y el melocoton gigante y Sofía en El Gran Gigante bonachón, ambos de Roald Dahl y Harry Potter de la serie mundialmente famosa de J. K. Rowling.





Ilustración de David Copperfield de Harold Copping (1863-1932) y de Oliver Twist de Jessie Willcox Smith (1863-1935)




Dorothy y sus amigos de William Wallace Denslow (1856-1915) y Pipi y su caballo "Pequeño tío" de Ingrid Vang Nyman (1916-1959)



Frodo y demás acompañantes en la búsqueda del anillo. por los hermanos Hildebrandt, Greg (1939-) y Tim (1939-2006)


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"Aunque no voy a sostener que el nacer en un hospicio sea en sí mismo la más afortunada y envidiable
Resultado de imagen de la vida de calabacincircunstancia que pueda acaecer a un ser humano, mantengo que en este caso particular fue lo mejor que pudo ocurrirle a Oliver Twist dentro de lo posible. La verdad es que fue bastante difícil persuadir a Oliver de que se hiciera cargo de respirar —enojoso menester, pero que la costumbre ha hecho necesario para vivir tranquilamente—, y por algún tiempo estuvo jadeando en un colchoncito de borra, desigualmente suspendido entre este mundo y el otro, pero con la balanza decididamente a favor del último. Ahora bien, si durante aquel breve rato Oliver hubiera estado rodeado de abuelitas atentas, tiítas ansiosas, niñeras experimentadas y doctores de profunda sabiduría, segura e inevitablemente que lo habrían matado en un periquete. Pero como no había nadie presente, excepto una vieja pobre, un tanto achispada por una desacostumbrada ración de cerveza, y un cirujano parroquial que hacía tales menesteres por contrato, Oliver y la Naturaleza se jugaron la partida mano a mano. El resultado fue que, tras algunos esfuerzos, Oliver respiró, estornudó y empezó a anunciar a los habitantes del hospicio el hecho de que sobre la parroquia caía una nueva carga, y con tan fuerte chillido como lógicamente podía esperarse de un niñito que no poseía aquel utilísimo instrumento que es la voz desde hacía más de tres minutos y cuarto. Al dar Oliver aquella primera prueba del funcionamiento desenvuelto y adecuado de sus pulmones, se oyó el roce de la colcha de retazos lanzada descuidadamente sobre la armadura de hierro de la cama, se irguió ligeramente de la almohada el pálido rostro de una joven y una voz apagada articuló imperfectamente estas palabras: —Dejadme ver al niño y morir. El cirujano había permanecido sentado con la cara vuelta hacia el fuego, ora calentándose, ora frotándose las palmas de las manos, pero, al hablar la joven, se levantó y, yendo hasta la cabecera de la cama con más bondad de la que podría haberse esperado de él, dijo: —Ea, no hables de morir todavía. —¡Oh, no! Que el Señor la bendiga, corazoncito —repuso la enfermera, apresurándose a guardar en el bolsillo una botella de vidrio verde cuyo contenido había estado degustando en un rincón con evidente satisfacción—. Que el Señor la bendiga, corazoncito; cuando haya vivido tanto como yo, mire usté, y haya parido trece niños y tos muertos menos dos, y tos en el hospicio conmigo, entonces sabrá que no hay que tomárselo así, corazoncito. Piense lo que es ser madre, piénselo, cielito. A lo que parece, la perspectiva consoladora de las esperanzas de una madre no produjeron el efecto debido. La enferma meneó la cabeza y tendió la mano hacia el niño. El cirujano lo puso en sus brazos. Apretó ella apasionadamente sus fríos labios sobre la frentecita, se pasó las manos por la cara, lanzó una mirada extraviada, se estremeció, cayó hacia atrás y... murió. Le frotaron el pecho, las manos, las sienes, pero la sangre se le había helado para siempre. Le hablaron de esperanza y consuelo. Le habían faltado durante demasiado tiempo. —Se acabó, señora Thingummy —dijo al cabo el cirujano. —¡Ah, pobrecilla, así es! —dijo la enfermera recogiendo el tapón de la botella verde que se había caído sobre la almohada al inclinarse a coger al niño—. ¡Pobrecilla! —No se moleste en mandar a buscarme si el niño llora, enfermera —dijo el cirujano poniéndose los guantes con mucha parsimonia—. Es muy posible que dé guerra. Si así es, dele unas gachas. Se puso el sombrero y, deteniéndose junto a la cama según se dirigía a la puerta, añadió: —Era bonita también. ¿De dónde era? —La trajeron anoche —replicó la vieja— por orden del inspector. La encontraron tirada en la calle; había caminado un buen trecho, pues traía los zapatos hechos trizas, pero nadie sabe de dónde venía o adónde iba. Se inclinó el cirujano sobre el cadáver y levantó la mano izquierda. —La historia de siempre —dijo meneando la cabeza—; sin alianza, según veo. En fin... Buenas noches.



TEXTO 1
 Capítulo 1 “...Evidentemente, esta consoladora perspectiva de esperanzas maternas no surtió el efecto apetecido. La paciente movió tristemente la cabeza y tendió la mano hacia su hijo. El médico lo depositó en sus brazos. Ella apretó ardientemente sus pálidos labios sobre la frente del niño, se pasó luego las manos sobre el rostro, miró en derredor con ojos extraviados, se estremeció, cayó de espaldas... y murió. Le frotaron el pecho, las manos y las sienes; mas la sangre se había detenido para siempre. Antes habían hablado de esperanza y de consuelos. Hacía mucho tiempo que éstos eran desconocidos para ella. - ¡Todo ha terminado, señora Thingummy! —dijo el médico, al cabo. - ¡Ah! ¡Pobrecita! Ya lo veo —murmuró la enfermera, recogiendo el tapón de la botella verde, que se había caído sobre la almohada al tiempo de inclinarse a levantar al niño—. ¡Pobre mujer! - No os molestéis en mandar por mí si el niño llora —dijo el médico, poniéndose los guantes con gran parsimonia—. Es muy probable que esté molesto. En ese caso, dadle un poco de papilla —se puso el sombrero y, deteniéndose junto a la cama, camino de la puerta, añadió—: Era guapa la muchacha... ¿De dónde vino? - La trajeron anoche —respondió la vieja— por orden del visitador. La encontraron tendida en la calle. Debió de haber andado mucho, pues traía los zapatos destrozados; pero nadie sabe de dónde venía ni adónde iba. Se inclinó el doctor sobre el cadáver y le alzó la mano izquierda. - ¡Lo de siempre! No hay anillo de boda. ¡Ah! ¡Buenas noches! Se fue el médico a cenar, y la enfermera, tras haberse aplicado una vez más a la verde botella, se sentó en una silla baja delante del fuego y comenzó a vestir al infante. ¡Qué excelente ejemplo, el joven Oliver Twist, del poder de los vestidos! Liado en la colcha que hasta este momento fuera su único abrigo, lo mismo podría haber sido el hijo de un noble que el de un mendigo; difícil le hubiera sido al más soberbio desconocido asignarle su puesto adecuado en la sociedad. Mas ahora, envuelto ya en las viejas ropas de percal, amarillentas de tanto uso, quedó clasificado y rotulado, y al instante ocupó su debido lugar: era el hijo de la parroquia, el hospiciano huérfano, el galopín humilde y famélico que ha de ser OliverTwist abofeteado y tundido a su paso por el mundo, despreciado por todos y por nadie compadecido. Oliver lloraba con fuerza; mas si hubiera podido saber que era un huérfano a merced de las indulgentes gracias de capilleros y limosneros, acaso hubiera llorado mucho más. 

TEXTO 2 Capítulo 2 “(...) ya que en el preciso instante en que un niño había logrado existir con la más reducida porción posible del más flojo alimento, tristemente acontecía, ocho casos y medio de cada diez, que enfermaba de hambre y de frío, caíase al fuego por descuido o medio se asfixiaba por accidente, en cualquiera de cuyos casos el desventurado ser era llamado al otro mundo, donde se reunía con los padres a quiénes nunca había conocido.” Págs. 15. (...) El niño que lleva por nombre Oliver Twist cumple hoy nueve años. - ¡Dios le bendiga! —exclamó la señora Mann, irritándose el ojo izquierdo con la punta del delantal. Pensar con el cine Claqueta – Ciclo Superior © Irene de Puig - GrupIREF 18 - Y, a pesar de haber ofrecido una recompensa de diez libras, posteriormente aumentada a veinte, a pesar de los superlativos y casi diré sobrenaturales esfuerzos realizados por parte de la parroquia —dijo Bumble—, no hemos podido averiguar quién es el padre, ni tampoco el domicilio, nombre ni condición de la madre. La señora Mann alzó sus manos con asombro; mas, tras un instante de reflexión, añadió: - ¿Cómo es, entonces, que el niño tiene nombre siquiera? Se irguió el celador con orgullo y contestó: - Porque yo lo inventé. - ¿Vos, señor Bumble? - Yo, señora Mann. A nuestros recogidos les damos un nombre por orden alfabético. Al último le correspondía la ese, y lo llamé Swubble. A éste, la te, y le puse Twist. El que venga detrás será Unwing, y el siguiente, Vilkins. Tengo nombres a la medida hasta terminar el alfabeto, y al llegar a la zeta, vuelta a empezar.” (Charles Dickens. Las aventuras de Oliver Twist, www.puntodelectura.com Págs. 19-20) • DERECHO/S a los cuáles hace referencia este fragmento...................................................... TEXTO 3 Capítulo 2 “(...) La habitación donde comían los niños era una amplia sala de piedra, con un perol en un extremo, del cual el director, ataviado con un delantal al efecto, y auxiliado por una o dos mujeres, servía las gachas a la hora de comer. De esta gozosa mezcla se le daba a cada niño una escudilla, y nada más, excepto en ocasión de alguna gran festividad, en que se les otorgaban dos onzas y un cuarto de pan más. No era preciso lavar los cuencos, ya que los niños los pulían con sus cucharas hasta sacarles brillo, y al terminar esta operación —en la que no tardaban mucho, por ser las cucharas casi del mismo tamaño que las escudillas—, se sentaban mirando fijamente el caldero, con ávidos ojos, que parecían devorarlo, entreteniéndose, entretanto, en chuparse los dedos con la mayor fruición, a fin de recoger las salpicaduras de gachas que pudieran haber quedado en ellos. Por regla general, los niños gozan de excelente apetito. Oliver Twist y sus compañeros sufrían desde hacía tres meses las torturas de aquella lenta inanición; por último, se hizo tan voraz y desaforada su hambre, que uno de los chiquillos, bastante alto para su edad, y que no estaba acostumbrado a aquello, puesto que su padre tuvo una pequeña casa de comidas, anunció secretamente a sus compañeros que, si no le daban otro plato de gachas per diem, tenía miedo de llegar a comerse al niño que dormía junto a él. Tenía la mirada extraviada, hambrienta, y le creyeron sin reserva. Se celebró consejo; se echó a suertes quién debería acercarse al director después de cenar aquella noche para pedirle más, y le tocó a Oliver Twist. Llegada la noche, los niños ocuparon sus puestos. El director, con su uniforme de cocinero, se colocó junto al caldero; se pusieron tras él sus míseras auxiliares, se sirvieron las gachas y se pronunció una larga jaculatoria sobre el escaso público. Desaparecidas las gachas, cuchichearon los chiquillos entre sí e hicieron una seña a Oliver, mientras sus contiguos vecinos le daban con el codo. No obstante su niñez, se sentía rabioso de hambre, hostigado por su desdicha. Se levantó de la mesa y, avanzando hasta el director con la escudilla y la cuchara en la mano, dijo, algo asustado de su temeridad: - Por favor, señor; quiero un poco más. El director era un hombre robusto y saludable; pero se quedó pálido. Contempló estupefacto al pequeño rebelde durante unos segundos, y luego tuvo que asirse al caldero para no caerse. Las ayudantas se quedaron paralizadas de asombro; los niños, de temor. - ¡Cómo! —exclamó, al cabo, el director con voz débil. - Por favor, señor —repitió Oliver—; quiero un poco más. El director descargó un golpe con el cucharón sobre la cabeza de Oliver, le cogió del brazo y llamó a gritos al celador. 



"La Junta se hallaba reunida en cónclave solemne cuando el señor Bumble penetró precipitadamente en la estancia, presa de gran excitación, y, dirigiéndose al caballero de la elevada silla, dijo: - ¡Señor Limbkins, perdonadme...! ¡Oliver Twist ha pedido más! Hubo un sobresalto general. Se pintó el horror en todos los semblantes. - ¿Más? — exclamó el señor Limbkins—. Calmaos, Bumble, y contestadme concretamente. ¿Debo entender que pidió más, después de haberse comido la ración asignada por el reglamento? - Así ha sido, señor —respondió Bumble. - Ese niño acabará ahorcado —exclamó el caballero del chaleco blanco—. Estoy completamente convencido de que ese niño acabará en la horca.”

TEXTO 4 Capítulo 3 “Durante una semana después de cometido el impío e irreverente ultraje de pedir más comida, Oliver permaneció preso e incomunicado en la oscura y solitaria habitación donde le llevaron la sabiduría y misericordia de la Junta.” (

la fórmula de los niños huérfanos
La fórmula de los niños huérfanos

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Huérfanos literarios (y cinematográficos)



 

Calabacín es el curioso mote de un niño huérfano de 9 años. Tras la muerte de su madre, Calabacín se hace amigo de un policía llamado Raymond, que le acompaña a su nuevo hogar de acogida donde viven más huérfanos. En un principio no se lleva muy bien con el resto de los niños, pero ..


 La película es la ópera prima de Claude Barras, y está escrita por Céline Sciamma (directora de 'Girlhood' y 'Tomboy'). Es una adaptación de la novela de Gilles Paris 'Autobiografía de Calabacín'. Aún sin haberse estrenado se convirtió en la película de animación más premiada de 2016.



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CHARLES KINGSLEY - LOS NIÑOS DEL AGUA (OCÉANO, 2008). 31 CM ZENA HOLLOWAY HEIDI TAYLOR ¡RARO! (Libros de Segunda Mano - Bellas artes, ocio y coleccionismo - Otros)
Fotografía Los niños del agua  Zena Holloway





Prueba de Lengua Ev II

 -La técnica del resumen.

-estructura de la noticia.

-El reportaje. El pódcast

- La narración.

-Estructura de las palabras.

- Sinónimos/antónimos.

- El adverbio.

-Los extranjerismos/ los préstamos léxicos.

- Lectura/película: Vida de Calabacín.

Préstamos y extranjerismos


juego digital

Préstamos y extranjerismos

 

 

 

Se denominan extranjerismos a aquellas palabras que incorporamos a nuestra lengua de una lengua extranjera y no sufren ningún tipo de modificación, es decir, las asimilamos tal y como se dicen en su idioma de origen.

Por ejemplo: pizza, camping, holding, carnet, rock...

 

Se denominan préstamos a aquellas palabras que utilizamos en castellano y que proceden de otros idiomas, pero que adaptamos a nuestra lengua según las normas ortográficas (para una mejor y más fácil pronunciación).

Por ejemplo: fútbol (football), tenis (tennis), béisbol (baseball), computadora (computer), restaurante (restaurant)...

 

Estas palabras extranjeras pueden proceder de diversas lenguas. Veamos algunos ejemplos de extranjerismos y préstamos:

Palabras que proceden del inglés: gol, bistec, escáner.

Palabras que proceden del francés: eau de toilette, popurrí, chéf.

Palabras que proceden del italiano: pizza, espaguetis, paparazzi.

Palabras que proceden del árabe: adelfa, acequia, abalorio.

Palabras que proceden de las lenguas indígenas americanas: patata, tabaco, hamaca.

 

 

------- oo O oo -------

 

 

Ejercicios

1. Indica cuáles de las siguientes palabras son préstamos o extranjerismos (S) y cuáles no (N):

Inicia sesión para hacer seguimiento de tus autoevaluaciones
1)Beicon
2)Zapato
3)Camión
4)Parking
5)Pantalón
6)Básquet
7)Camino
8)Cassette
9)Líder
10)Sándwich
11)Restaurante
12)Baguette
13)Ordenador
14)Almohada
15)Vagón
16)Carretera
17)Puerta
18)Chocolate
19)Caucho
20)Pan
21)Vela
22)Cuadro
23)Espejo
24)Aguacate
25)Mujer
26)Varón
27)Corregir
28)Cargador
29)Camiseta
30)Florero
Corregir   Ver Solución   Limpiar

 

 

2. Indica si los siguientes préstamos y extranjerismos proceden del inglés (I), francés (F), italiano (IT), árabe (A) o de las lenguas indígenas americanas (AM):

Inicia sesión para hacer seguimiento de tus autoevaluaciones
1)Cacique
2)Córner
3)Huracán
4)Piano
5)Foie-gras
6)Film
7)Maíz
8)Lifting
9)Lasaña
10)Boutique
11)Almohada
12)Ojalá
13)Azul
14)Flan
15)Chaqueta
16)Streaming
17)Corner
18)Tomate
19)Carnaval
20)Caucho
Corregir   Ver Solución   Limpiar

Extranjerismos
Prestamos

miércoles, 14 de febrero de 2024

Adverbios en canciones


Adverbios en canciones


Resultat d'imatges de clave de solEsta actividad es sencilla y distraída, se puede trabajar con los alumnos individualmente o en grupo. El ejercicio es simple: hay que encontrar los adverbios que aparecen en los fragmentos de canción seleccionados y, para ello, cuentas con una pequeña ayuda. Lo lógico es darles las pistas, escuchar el fragmento y dejar proyectada la letra unos minutos para que finalicen la actividad y los encuentren.


  1. Encuentra dos adverbios de negación, uno de tiempo y uno de negación en la siguiente canción: 

    “Ojalá no te hubiera conocido nunca”, Muchachito Bombo Infierno

    Ojalá no te hubiera conocido nunca (x4)

    Para no amarte siempre, para no verte sin verte,

    para borrar tu recuerdo

    del que siempre me acuerdo y nunca me deja en paz.

    oh ouo ouo oh ouo (x2)

  2. Encuentra dos adverbios de duda y dos de tiempo en la siguiente canción:

    “Colgando en tus manos”, Carlos Baute

    Quizá no fue coincidencia encontrarme contigo

    Tal vez esto lo hizo el destino

    Quiero dormirme de nuevo en tu pecho

    Y después me despierte en tus besos

    Tu sexto sentido sueña conmigo

    Sé que pronto estaremos unidos

    Esa sonrisa traviesa que vive conmigo

    Sé que pronto estaré en tu camino

    3. Encuentra un adverbio de modo, uno de negación y tres de tiempo en la siguiente canción:                         “Se me olvidó otra vez”, Maná

    Probablemente ya de mí te has olvidado

    Y sin embargo yo te seguiré esperando

    No me he querido ir para ver si algún día

    Que tú quieras volver me encuentres todavía

    Por eso aún estoy en el lugar de siempre

    En la misma ciudad y con la misma gente

    Para que tú al volver no encuentres nada extraño

    Y sea como ayer y nunca más dejarnos

    Probablemente estoy pidiendo demasiado

    Se me olvidaba que ya habíamos terminado

    Que nunca volverá que nunca me quisiste

    Se me olvidó otra vez que sólo yo te quise

    4. Encuentra un adverbio de tiempo, uno de lugar, uno de negación, uno de cantidad y dos adverbios juntos en la siguiente canción: “La casa por el tejado”, FIto y los Fitipaldis

    Ahora sí, parece que ya empiezo a entender

    Las cosas importantes aquí

    Son las que están detrás de la piel

    Y todo lo demás…

    empieza donde acaban mis pies

    después de mucho tiempo aprendí

    que hay cosas que mejor no aprender.

    El colegio poco me enseñó…

    si es por esos libros,

    nunca aprendo…

    a coger

    el cielo con las manos

    a Reír

    y a llorar lo que te canto

    a Coser  mi alma rota

    a Perder el miedo a quedar como un idiota

    y a empezar

    la casa por el tejado

    a poder dormir

    cuando tú no estás a mi lado

    menos mal que fui un poco granuja

    todo lo que sé me lo enseñó una bruja



Adverbios en canciones

 Encuentra dos adverbios de negación, uno de tiempo y uno de negación en la siguiente canción: 

“Ojalá no te hubiera conocido nunca”, Muchachito Bombo Infierno

Ojalá no te hubiera conocido nunca (x4)

Para no amarte siempre, para no verte sin verte,

para borrar tu recuerdo

del que siempre me acuerdo y nunca me deja en paz.

oh ouo ouo oh ouo (x2)

1.                               Encuentra dos adverbios de duda y dos de tiempo en la siguiente canción:

Tipo de palabras:

-Coincidencia

--pronto

-encontrarme

-Unidos

Haz un micrrorelato con las 4
 
“Colgando en tus manos”, Carlos Baute

Quizá no fue coincidencia encontrarme contigo

Tal vez esto lo hizo el destino

Quiero dormirme de nuevo en tu pecho

Y después me despierte en tus besos

Tu sexto sentido sueña conmigo

Sé que pronto estaremos unidos

Esa sonrisa traviesa que vive conmigo

Sé que pronto estaré en tu camino

 

3. Encuentra un adverbio de modo, uno de negación y tres de tiempo en la siguiente canción:                         “Se me olvidó otra vez”, Maná

Simple/derivada

Probablemente



Demasiado



Lugar 




Deriva ciudad
 
Probablemente ya de mí te has olvidado

Y sin embargo yo te seguiré esperando

No me he querido ir para ver si algún día

Que tú quieras volver me encuentres todavía

Por eso aún estoy en el lugar de siempre

En la misma ciudad y con la misma gente

Para que tú al volver no encuentres nada extraño

Y sea como ayer y nunca más dejarnos

Probablemente estoy pidiendo demasiado

Se me olvidaba que ya habíamos terminado

Que nunca volverá que nunca me quisiste

Se me olvidó otra vez que sólo yo te quise

4. Encuentra un adverbio de tiempo, uno de lugar, uno de negación, uno de cantidad y dos adverbios juntos en la siguiente canción: “La casa por el tejado”, FIto y los Fitipaldis

Ahora sí, parece que ya empiezo a entender

Las cosas importantes aquí

Son las que están detrás de la piel

Y todo lo demás…